En Murcia se conjuga lo moderno con lo antiguo, como este hermoso puente (o pasarela) colgante sobre el río |
He estado pasando
unos días en la capital murciana, antes y después de disfrutar de las fiestas navideñas con la familia. Sólo me he instalado y poco más, como quien dice,
porque he realizado un alto en el camino en Alicante capital en casa de mi niña,
algo que parecía iba a ser una visita de
médico, pero que finalmente se extendió
un poco.
De todas maneras, en los últimos días del año, las probabilidades
de traslado se encontraban un tanto anuladas,
debido justamente a las constantes
fiestas, días inmaculados, días constitucionales, navidades, reyes y puentes varios. El mes de diciembre se fue en un plis plas, sin que
te dieras cuenta. De modo que puede considerarse un alto en el camino, que se
renovó en los primeros días del mes de enero, con la vuelta a la zona y la
continuidad del viaje.
Murcia es una región que me atraía especialmente.
Antiguo como la catedral murciana,sobrecargada y rococó |
Por un lado, se
encuentra lo conocido como “la huerta murciana”, una realidad en forma de
hortalizas, frutas y verduras cultivadas muchas veces en pequeñas y medianas parcelas,
muchas de ellas orientadas a la demanda nacional además de la local. Es,
por lo tanto, un lugar que puede considerarse un gran mercado, una comarca
destinada a conseguir la mayor producción, la mejor cosecha, los productos
estrella, y una gran variedad de artículos que posteriormente viajan por
tierra, mar y aire, hacia su destino nacional y europeo.
Por otro lado, ocurre
que este tipo de manufactura obliga a los agricultores a forzar la producción,
de manera tal que se avienen a la adquisición y utilización de pesticidas,
insecticidas, potenciadores de sabor, color y aromas, o el encerado de las
frutas para mayor brillantez, entre otros movimientos industriales que permiten
una mayor oferta y venta de hortalizas, frutas y vegetales en general.
OTRO TIPO DE CULTIVO
También te encuentras con sorpresas agradables |
La pregunta es entonces...¿ cómo pueden subsistir granjas
ecológicas junto a este tipo de producción? Este caso lo pude ver claramente en
una pequeña granja de Tarragona, donde dos jóvenes alemanas intentaban conjugar
su esquema vegetariano y ecológico, estando rodeada su pequeña parcela, de
granjas de engorde de animales, principalmente cerdos. Es duro y muy difícil, sobre
todo cuando tu granja es pequeñita, tú eres extranjera, te envuelven los
comederos de cerdos, y el olor de las deposiciones se infiltra cotidianamente en las fosas nasales como un
cuchillo. Los vecinos te miran como un bicho raro, y comentan como al desgaire
que “esa granja ya ha cambiado de mano varias veces”.
No me extraña.
Preparando el siguiente artículo (y probando el selfie stick que los Reyes dejaron en casa de Ana, la madre de mis pekes). |
Por ello, volviendo al tema murciano, esas particularidades lo que me
atrae. Conocer de primera mano como conviven ecología y producción industrial,
ecología y pesticidas, lugares protegidos y explotación sin más. Posteriormente
quisiera sumergirme en la realidad de Almería, donde la provincia es un
desierto con un mar de plásticos de invernaderos que puede verse desde los
satélites. Un lugar que produce más de un cinco por ciento de producción a
nivel nacional de hortalizas y verduras. Allí se dispara la negación de lo
ecológico, y quisiera descubrir como cohabitan granjas o lugares ecológicos con
estos gigantes de producción plastiquera, hidropónica y multitudinaria.
En Almería los invernaderos atraen asimismo a población
foránea, mucho inmigrante, gente que desconoce la labor ecológica, que no le
importa con tal de realizar una venta mejor de su producto, o la obtención de
dinero rápido. En fin, muchas aristas que conviene ver si se puede concretar.
Pero de momento me he puesto en marcha desde Alicante, y el
motocarro sigue devorando como loco los kilómetros. Bueno…como loco…pero
bien…sigue adelante con ánimo renovado.
Y mi destino primario es Murcia capital, con otras
intenciones.
Pero eso será material para otra historia…o no.
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